martes, 3 de diciembre de 2013

Falleros, que no nos engañen

 Lo del Ayuntamiento de Valencia y su juego de malabares presupuestarios no tiene fin, parece que aumenten la subvención a las falla pero resulta que no, es como el juego de esconder la pelotita bajo de uno de los tres cubiletes e intercambiar la posición preguntándole al terminar la maniobra “¿donde esta la pelotita?”, me explico. 

 Hace ya algunos días, en la asamblea de presidentes, el Concejal de Fiestas del Ayuntamiento de Valencia, Sr. Lledó, informó de la decisión del equipo de gobierno de recuperar los 4 puntos de subvención a los monumentos que, en el momento álgido del “recortes para todos”, se eliminaron. Por tanto, al poco tiempo volvemos a la situación inicial y pasamos ahora de una subvención del 21 al 25%. 

 En su momento se acogió esta decisión por el mundo fallero con resignación, conformismo y encogiendo los hombros, ya que si la fiebre del tijeretazo había llegado a colectivos socialmente sensibles “nosotros no íbamos a ser menos”. 

 Con carácter general la noticia, y como no podía ser de otra manera, no ha sido mal recibida por el colectivo fallero, pero no va a paliar la particular travesía en el desierto que está pasando el mundo de las fallas con el aumento al 21 % del IVA a toda manifestación cultural, que golpeó duro en la línea de flotación de los monumentos de las comisiones y, sobre todo, de los artistas falleros. Esto está provocando que, ahora que esta de moda celebrar la fiesta de Halloween con profusión, tengamos en el sector artístico de las fallas a nuestro particular muerto viviente. 

 Lo sorprendente de todo esto es que los que más ruido han hecho, y están haciendo, con el tema del IVA son Compromis y PSOE, que jamás dedicaron un minuto de atención al mundo de las fallas por considerarlo en las antípodas de su ideario. ¿Qué es lo que ha pasado?¿El mundo al revés? 

 No, yo le digo lo que ha pasado, frente a la incompetencia y desfachatez de unos, el Partido Popular, por hacer lo contrario de lo que prometieron en su programa electoral, no subir el IVA, faltando sin rubor al programa electoral por el que le habían votado los ciudadanos, nos encontramos a los otros, Compromis y PSOE, haciendo gala de un oportunismo político de manual, mientras EU mira hacia otra parte porque esto no va con ellos. 

 Volviendo al tema del aumento de la subvención, no seré yo quien critique la medida, al contrario, todo aquello que repare en beneficio de la cultura hace mejores personas, mejores ciudadanos y por tanto mejores sociedades, y aunque resulte manido decirlo, las fallas sin duda son una manifestación artística y cultural de primer orden. Sin embargo, no podemos pasar por alto algunas cuestiones que han acompañado esta medida y que merecen un análisis político. 

 En primer lugar el momento elegido. ¿Acaso vienen elecciones?. Casualmente en el año 2015 tenemos las elecciones locales y tomar esta medida en vísperas del año electoral “canta” mucho. Aunque, no lo duden, lo habrían hecho sin ningún rubor si lo necesitaran. Pero es ahora cuando interesa hacerlo. ¿Por qué?, muy sencillo, para bajar el volumen de los altavoces críticos que tronaban en sus orejas por la postura tan endeble y sumisa que han tenido ante la subida del IVA. 

 Siguiendo con los deseos manifestados por el propio concejal de que el 4% vaya a parar a los artistas podemos ahondar en hacer una crítica al momento elegido ¿Por qué ahora y no en el primer semestre del año? Ahora los contratos están cerrados y ese 4% no va a destinarse en el año 2014 a mejorar las fallas ni a incrementar su presupuesto. Para eso, en todo caso, tendremos que esperar al 2015. 

 Resulta llamativo es la coletilla de “que se espera que ese 4% de aumento vaya destinado a la falla y al artista” dejando entrever la posible utilización de la subvención para otros menesteres de la falla………….…....¡¡y nos quedamos tan anchos!!. Si piensa que eso pasa o puede pasar lo responsable es poner las medidas que garanticen el cumplimiento de los fines de la subvención. Si tanto peligro ve en que se desvíe el destino de la subvención, pensemos en medidas alternativas, por ejemplo, estudiemos si es factible o no subvencionar a los artistas y no a las fallas. 

 En segundo lugar hay que analizar el “esfuerzo” que ha supuesto para el consistorio la medida. ¿Van a incrementar la partida presupuestaria?. NO, o por lo menos, eso creo…… y mientras haya servicios sociales en peligro, eso debemos esperar. 

 Lo que pasa es que con la rebaja del precio de los monumentos por la crisis, el descenso del número de falleros que afecta a los ingresos de las fallas, la subida del IVA, la bajada de la subvención que ahora se sube y demás desgracias que han ido recayendo sobre las espaldas falleras resulta que, con la misma partida o similar, ahora les llega para subvencionar el 25%. Así que con la misma tela hacemos un traje que vendemos a bombo y platillo, que no deja de ser el trapito de los domingos en un armario apolillado. 

 Se necesita es menos medidas de oportunismo político local y buscar alternativas y soluciones de carácter general y global para las fallas. Allanar el camino de una fiesta singular alrededor de la cual gira una industria que dinamiza nuestra Comunidad, que genera puestos de trabajo y que ingresa impuestos en las arcas municipales, autonómicas y estatales. 

 Hasta la fecha solo los falleros con su esfuerzo, su dinero y su tesón son los que realmente hacen que la fiesta y el entramado económico que se desarrolla a su alrededor no desfallezca, por lo que mientras esto no cambie, es por lo que lucharé por y para las fallas.